El ardiente Núcleo de Magma es el corazón de lava de Montaña Roca Negra donde, hace mucho, el enano Hierro Negro Thaurissan invocó a Ragnaros, Señor del Fuego, a Azeroth, algo que ahora se consideraría un paso en falso. Ragnaros incineró con rapidez el reino de Thaurissan y esclavizó a su pueblo, lo que también tuvo como ventaja (desde el punto de vista de un Señor del Fuego) el efecto colateral de crear el volcán acogedor (desde el punto de vista de un elemental de fuego) conocido como Montaña Roca Negra. Ahora las abrasadoras cavernas volcánicas de Núcleo de Magma están patrulladas por esbirros elementales ansiosos por acalorar a cualquier héroe tan estúpido como para invadir el dominio del Señor del Fuego.
En Montaña Roca Negra: Una aventura de Hearthstone, los héroes podrán desafiar a algunos de los más infames y disgustados elementales de Núcleo de Magma y reclutar esbirros elementales para sus propias colecciones. Los elementales son unos seres poderosos vinculados al poder del plano elemental del que provienen; cuando uno de estos seres esté en vuestro tablero de Hearthstone, seguro que tendrá un gran efecto.
Fuego amigo
El despiertallamas es un elemental de fuego ambicioso. Además de ayudar cuando necesitéis avivar un fuego aletargado, los despiertallamas tienden a ser más fuertes e inteligentes que sus compañeros elementales y a menudo poseen cierta habilidad con las artes arcanas. El fuego es su arma favorita y, si os ganáis la lealtad de un despiertallamas, podréis contar con que sus llamas abrasadoras estarán a vuestro servicio.
Resulta que a los señores elementales les gusta tener mascotas. Por desgracia, cuando un gigante de magma piensa en «adorable», tiene una lista con cosas como «gigante», «dos cabezas», «fauces con colmillos» y «de magma viva». Los únicos seres moradores del plano de fuego que encajan con esta descripción son los terroríficos canes del Núcleo. Aunque tener uno de esos bichos puede hacer de la búsqueda de casa toda una faena, no hay mejor amigo de cuatro patas cuando estás con la espalda contra la pared.
Los diablillos son como cucarachas. Si ves uno, seguro que habrá más cerca, y probablemente haciendo de las suyas, como pincharte las ruedas, cambiarte el fondo del escritorio por algo vergonzoso, o «diablilleando», como siempre. Es incluso peor cuando están en una banda... o LA CAÑA si están de tu parte.
¡Si creéis que podéis aguantar el calor, os esperan valiosas recompensas en el Núcleo de Magma cuando llegue Montaña Roca Negra: Una aventura de Hearthstone!